Hace
más de veinte años escribí mi novela "El Secreto del Dragón - La
revelación de los Sacros Papiros", con base en el conflicto
Israel-Palestina. Tristemente, los conflictos no han cesado desde que en 1947 la
ONU parte el territorio Palestino en dos estados ante la salida de Inglaterra
de esas tierras, resolución que fue rechazada por los estados árabes.
Una
larga lista de guerras y conflictos, en medio de algunos acuerdos infructuosos,
han marcado esta zona del Medio Oriente: La Guerra de los Seis Días, en 1967,
es la más emblemática de estas guerras.
En
1948 se instaura el estado de Israel, y la Liga Árabe intenta la invasión del
recién creado país.
La
OLP (Organización para la Liberación de Palestina) es creada en 1974 que
buscaba la aniquilación total del estado de Israel.
En
1987 el grupo terrorista Hamas nace para controlar la franja de Gaza. Esta
organización nace a raíz de que la OLP tiene acercamientos diplomáticos con el gobierno
israelita, con lo que no está de acuerdo.
La
Intifada inicia en el 2000 a raíz del asesinato de seis jóvenes palestinos abatidos
por la policía israelí.
El
actual presidente de Israel, Benjamín Netanyahu, ha promovido la construcción
de más asentamientos judíos en Gaza desde 2013, al tiempo de acusar a Hamas de
haber asesinado a tres jóvenes israelitas.
En
días recientes, la conflagración se ha recrudecido, pagando por ello, como siempre,
los inocentes.
Los
fundamentos de mi novela “El Secreto del Dragón” es muy simple: a lo largo de
los siglos, la humanidad parece ser una raza de dragones que desde su aparición
en esta Tierra, no ha dejado lanzarse fuego unos contra otros. Más aún; en
nuestro diario devenir nos lanzamos fuego con nuestras palabras y silencios,
con nuestras acciones y omisiones, contra propios y extraños.
Muchos
de los conflictos que ahora se libran son heredados, y muchos de los
combatientes no saben por qué lo hacen. Es por eso que esta novela tiene esta
dedicatoria:
“A
los jóvenes del mundo que empuñan un arma sin saber por qué”
Si
crees que los dragones no existen, sólo mírate al espejo.
Muy interesante el contenido en este escrito.
ResponderBorrarEl conflicto que existe ahora entre estas 2 naciones pareciera ser interminable ya que los intereses y resentimientos de ambos seguirán cambiando y permaneciendo de una generación a otra . Las nuevas generaciones no sabrán realmente el porqué y el motivo de tanto odio , desacuerdo y pretensión pero lo más triste y cruel es que siempre paga gente inocente y no involucrada en esta estúpida guerra por el poder que por lo general , los que la emprenden , jamás se involucran. Esto sucede a nivel mundial.
Esta batalla tiene casi todos los años que lleva la humanidad y es increible que los odios se hereden a través de cientos de generaciones y no hay para cuando extinguir este sentimiento. Las organizaciones como la ONU en si no pueden erradicar estas diferencias porque no pueden cambiar la mentalidad estacionada durante cientos de años de los combatientes y como bien dice Susana: AL FINAL DEL DIA LOS UNICOS QUE PAGAN ESTAS DIFERENCIAS SON LOS INOCENTES
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