Desde hace más de un año, una manada de elefantes asiáticos, conformada por 15 miembros, partió de la Reserva Natural Nacional de Xishuangbanna, al sur de China. Ha recorrido más de 500 kilómetros rumbo al norte del país.
No
se sabe el motivo de esta increíble migración, pero algunos científicos especulan
que ha sido provocada por el deterioro de su hábitat, lo que los ha obligado a
buscar un refugio donde puedan satisfacer sus necesidades.
Los zoólogos no comprenden por
qué los elefantes abandonaron la reserva donde vivían y emprendieron una marcha
tan larga. En los últimos años, los paquidermos tienden a acercarse a las zonas
habitadas debido a que la agricultura remplaza sus plantas preferidas por
especies no comestibles. Los elefantes salvajes están protegidos en China.
Actualmente hay unos 300 contra 200 en los años 1980. - Foto: AP
Durante
su paso han causado pérdidas por más de 1.07 millones de dólares, pero sin
provocar heridos ni decesos. Sin embargo, la preocupación de los científicos se
ha agravado debido a que una nueva manada de elefantes ha emprendido su marcha
hacia el norte desde Yunnan, y no se descarta la posibilidad de que animales de
otras especies emulen lo hecho por los elefantes.
YUXI, CHINA - 2 DE JUNIO: La manada de elefantes salvajes pasea por una
aldea en el distrito de Hongta el 2 de junio de 2021 en Yuxi, provincia de
Yunnan de China. Tras su paso han dejado daños valorados en un millon de
dolares. Foto: Meng Zhubin / City Times / VCG a través de Getty Images. - Foto:
VCG via Getty Image
Las autoridades chinas han seguido a la manada con la ayuda de un dron, y las fotografías y videos han sido vistos por más de 8 millones de personas tan sólo en China
Un dron está preparado para
monitorear la migración de elefantes asiáticos salvajes en el condado de Eshan,
ciudad de Yuxi, provincia de Yunnan, suroeste de China, el 29 de mayo de 2021.
Las autoridades están rastreando 15 elefantes asiáticos salvajes en la
provincia de Yunnan, suroeste de China, mientras la manada migra hacia el
norte. -
Para mí, son muy claros los motivos de
los elefantes.
En mi novela “Un
cuento de tiranosaurios” narro la migración de una familia de estas
formidables bestias, precisamente hacia el norte, rumbo al Parque Nacional
Yellowstone, en Montana, USA.
Las causas que provocaron la migración
de mis tiranosaurios son muy distintas a aquellas por las cuales los elefantes
chinos la han emprendido: hace 65 millones de años un enorme meteorito destruyó
casi por completo todos los hábitats de la Tierra. En cambio, hoy, la humanidad
está provocando un deterioro similar, si bien a paso lento aunque no tanto.
Los dinosaurios hicieron su aparición
hace aproximadamente 240 millones de años, y su reinado perduró por 175 millones
de años. Nuestra especie, el homo
sapiens, hizo su aparición a lo sumo
hace 200 mil años. Un período que hace vernos, frente al de los dinosaurios, tan
sólo como unos recién llegados (apenas hemos vivido como especie un 0.11% respecto
a lo que vivieron los dinosaurios). Y sin embargo, estamos muy cerca de nuestra
extinción de seguir con nuestra conducta. Sólo 200 mil años nos ha tomado para deteriorar
de forma significativa nuestro hogar. 200 mil años…
Ninguna otra especie que ha pisado el
suelo o surcado los mares de este planeta atentó contra su entorno. Tampoco jamás
se ha enfrascado en guerras contra los de su propia raza, ni ha esclavizado, traficado
o torturado por cualquier causa a miembro alguno de su estirpe o inclusive de
otra. Nunca especie alguna se alzado contra sí misma como su más caro enemigo.
Sólo la nuestra.
Nos preciamos de ser la especie más
inteligente del planeta; una tocada por la mano de Dios; una que no admite (a
la fecha) que otras puedan habitar en otros planetas; una que reina la Tierra por
encima de todo y de todos, pretendiendo ser su ama y señora…
“Este mundo no nos pertenece; nunca
nos ha pertenecido. Pero frente a nuestra supuesta condición de seres
inteligentes, somos, en todo caso, completamente responsables del cuidado de la
Tierra y de todos los seres que en ella habitan, teniendo siempre en mente que
nuestra vida no es más que un destello fugaz en la vastedad del Tiempo.”
Carl Cupper
Un cuento de tiranosaurios… y sesenta y cinco
millones de años después
¿Somos
realmente la especie más inteligente o quizá la más estúpida?
Todo
dependerá de nuestra conducta en los años por venir.